Es cierto que en muchas ocasiones Cs ha demostrado ser el partido pomelo por excelencia: naranja por fuera y rojo por dentro. Eso no impide reconocer y elogiar las propuestas que hagan y que sean dignas de admirar, y la que ha propuesto Edmundo Bal mediante una carta para que el Congreso de los Diputados no cierre en agosto, es para quitarse el sombrero. Como bien asegura el representante de Cs “el virus no se va de vacaciones” y, por ese motivo, considero que quienes tienen que dar ejemplo hoy por hoy deben ser principalmente los del Gobierno trabajando por España, aquellos que los han votado, los que no lo hemos hecho y también los diferentes partidos políticos que representan a la oposición porque, aunque le pese a más de uno leer esto, están en una posición privilegiada en la que ni les faltará el trabajo, al menos a día de hoy, ni tampoco el sueldo como les ha sucedido a muchos de nuestros compatriotas.

Somos tantas y tantas personas las que hemos pedido en muchas ocasiones que la clase política haga un sobresfuerzo, que espero que con el tema de la COVID nos callen la boca y pospongan sus vacaciones a Canarias, Ginebra o a la China septentrional hasta que el virus pase, porque si están en las poltronas que están reitero, tanto unos como otros, es gracias a nosotros y por ese motivo merecemos un respeto. Cs en esta iniciativa ha estado muy bien, porque ha demostrado empatía. Luego los habrá que digan que es una jugada estudiada o no, como ha sucedido con la futura moción de censura que propondrá VOX, pero eso ya es otro cantar.

No me voy a meter en si su propuesta es interesada o no, lo que me importa es que los españoles necesitan a los políticos y los políticos tienen que ser agradecidos con sus votantes en general, porque el virus lo sufrimos todos. Progresistas, liberales y conservadores, hombres y mujeres, ricos y pobres, empresarios y trabajadores y unos cuantos tipos de personas más que no cito porque entonces estaría hasta las tantas redactando este artículo de opinión.

Los españoles queremos que el Congreso de los Diputados abra y le metáis las horas que sean necesarias, igual que desgraciadamente los sanitarios lo tuvieron que hacer en los meses tan oscuros en los que contábamos con miles y miles de muertos en los hospitales a causa de la COVID-19. Sed la solución para que todo esto finalice y no el problema que estáis siendo, unos atacando a otros, los otros a los unos, y no poniendo soluciones a cada situación que emerge en nuestro país. Lo dicho, gracias Edmundo por pensar en el bien de nuestros ciudadanos e insisto, cuando hay que criticaros se os critica, pero cuando haya que elogiar vuestras labores, no se me caerán los anillos por hacerlo y con esta que habéis tenido: ¡CHAPEAU POR CIUDADANOS!

Artículo de Jonathan Turrientes recogido del medio de comunicación El Diestro